Gran dilema: quiero verme como una Diva o como una fresca y natural chica de su hogar?!!! La mujeres tienen toda su vida, en especial su etapa adolescente para ir afirmando su personalidad, la forma de vestir, de usar el calzado, maquillarse o peinarse. Tiene la constante opinión de sus amigotas, de su madre, de sus novios. Pero qué es de la solitaria y secreta adolescencia de una chica cross???!!! Una siempre a las escondidas, poniéndose lo que puede, que un calzado de mamá, que un camisolín de mi hermana, que un corpiño de mi prima. Usando la funda de una almohada grande para simular un vestido largo, enroscarse una toalla en la cabeza para simular que una tiene el pelo debajo y recién sale de bañarse, o como un tocado árabe (de lo mas exótico!), poniéndose cualquier bijou que pudo “hurtar” del alhajero de la nona (para devolverlo luego, claro, no somos ladronas, che!). Nos veíamos en aquel gran espejo: ¡Divina!, como toda una diosa, moviéndonos con la sensualidad felina que una la vuelve loca, caminando con un pie delante del otro, moviendo las caderas como un péndulo rosa, sentándonos, sacando el culito lo mas, acercándose a la silla eternamente y manteniendo el torso y la cabeza alineado, erguidos, sosteniéndonos nuestra propia mirada delineada en negrrrrrro, y juntando los labios rrrrrojos como para besar a todo el mundo de una vez....Pero a veces el ojo de una cross ve lo que quiere ver su ingenuo y dulce corazoncito femenino. En un segundo, como si cayera un gran telón, lo que vemos en el espejo es un lindo flaquito, envuelto en una sábana, con un turbante de toalla, un collar colgado del cuello, y una cara que no sabés si es un mascaron de proa o el payaso mas decadente de un circo rasca. Si amigas, la adolescencia de una chica cross frente a su solitario espejo va del éxtasis a la decadencia en un segundo. Cuan agradecidas estaremos siempre a la magia de Internet. Gracias a éste magnífico medio pudimos averiguar mas sobre nuestra pasión cross, descubrir que hay legiones de nosotras en todo el mundo, que todas pasamos por casi las mismas experiencias, sin distinción de edades, razas, credos o latitudes geográficas. Nos pudimos comunicar entre nosotras, que no es poco. Pero volvamos a mi pregunta inicial. Damos por sentado que una quiere verse como la mujer mas sexy del mundo, fresca, natural, delicada, atractiva... Diosa! Con el tiempo vamos invirtiendo en lencería, calzado, vestidos, maquillaje, pelucas, bijou, perfumes. Vamos perfeccionando nuestra apariencia, el espejo nos devuelve a una mujer cada vez mas perfecta...Pero nuestro ojo cross nos sigue engañando!!! Una logró comprarse unas lindas medias de red, te ponés un corcet de vinilo que es un sueño, te acomodas una mini de cuero que corona unas piernas perfectas, que nacen de ese calzado con tacos de 15 cm. Te mirás al espejo y: ¡Wow!¡Qué hembra que sos, mamita! Das miles de vueltas frente al espejo, vas, venís, pasas, te asomas, tiras besitos! Al rato te preguntás: ¿Y ahora qué hacemos? Respuestas: -Me voy a dar una vuelta en auto -Me voy a una disco. -Me voy a caminar por la zona roja y dejo que me toquen bocina. -Me voy a un shopping. -Me voy a un parque a pasear el perro. -Olvidate de todo, no podés salir así. Es mas seguro que te metan en cana, que recibir la corona de Reina de la Primavera!!! Tengo que verme mas “normal”, si quiero salir y compartir mi imagen de mujer. Te mirás al espejo y empezás a preguntarte: ¿De haber nacido mujer y con la edad que ahora tengo, me pondría ésta indumentaria mas allá de trabajar en un show o tener una super noche de fantasías erótica y cama hot???? Por supuesto que no. Bendita sea la ropa unisex!!!! Jeans, musculosas, remeritas, sandalias, aritos, pulseras y collares...Un momento! Me veo al espejo con todo eso que usan indistintamente los hombres y mujeres, pero...solo veo al hombre, no a la mujer!!! No hay caderas, no hay tetas!!! OK...me pongo un poco de relleno aquí, otro poco allá...! Veo una mujer ahora??? ...Veo al muñeco de Michelín! ...Horror! Resultado: La ropa unisex es un gran invento, pero al rato de usarlas no me siento mas mujer que el sodero que descarga los cajones del camión de reparto. Definitivamente no hay nada para una cross que usar ropa bien de MUJER, nada de unisex!!! Faldas largas, cortas, medianas, camisolas de seda, camisitas de tul, tops, remeritas escotadas, pantalones ajustados (solo si tengo buenas gambas y culo), vestidos cortos, largos, lleno de colores y detalles de voladitos, bordados, aplicaciones de mostacillas, piedritas y demás. Ahora si. No me importa no tener “las super caderas”, no me importa no tener “tetas de 120”. Me gusta que los colores me sienten bien y se luzcan junto a mi piel, que las faldas acaricien mis piernas, las cubran o descubran al caminar. Me gusta ver mis manos con anillos, mis muñecas con pulseras y mi cuello rodeado de un collarcito. Me gusta jugar con mis aritos que adornan mis orejitas. Veo en el espejo una mujer que puede salir a pasear, al shopping, a la plaza, a la disco. Igual, no abandonaré mi corcet de vinilo, ni mis tacos de 15 cm, ni mi uniforme de colegiala, ni mi traje de conejita, ni mi maya de cuero con tachas, ni mi traje de diablita, ni de Gatubella, solo lo usaré en fiestitas y en la intimidad dando rienda suelta a mis fantasías mas calientes, en especial si comparto la cama. Una se debe a su público!!!
1 comentario:
Gran dilema: quiero verme como una Diva o como una fresca y natural chica de su hogar?!!!
La mujeres tienen toda su vida, en especial su etapa adolescente para ir afirmando su personalidad, la forma de vestir, de usar el calzado, maquillarse o peinarse. Tiene la constante opinión de sus amigotas, de su madre, de sus novios. Pero qué es de la solitaria y secreta adolescencia de una chica cross???!!!
Una siempre a las escondidas, poniéndose lo que puede, que un calzado de mamá, que un camisolín de mi hermana, que un corpiño de mi prima. Usando la funda de una almohada grande para simular un vestido largo, enroscarse una toalla en la cabeza para simular que una tiene el pelo debajo y recién sale de bañarse, o como un tocado árabe (de lo mas exótico!), poniéndose cualquier bijou que pudo “hurtar” del alhajero de la nona (para devolverlo luego, claro, no somos ladronas, che!).
Nos veíamos en aquel gran espejo: ¡Divina!, como toda una diosa, moviéndonos con la sensualidad felina que una la vuelve loca, caminando con un pie delante del otro, moviendo las caderas como un péndulo rosa, sentándonos, sacando el culito lo mas, acercándose a la silla eternamente y manteniendo el torso y la cabeza alineado, erguidos, sosteniéndonos nuestra propia mirada delineada en negrrrrrro, y juntando los labios rrrrrojos como para besar a todo el mundo de una vez....Pero a veces el ojo de una cross ve lo que quiere ver su ingenuo y dulce corazoncito femenino. En un segundo, como si cayera un gran telón, lo que vemos en el espejo es un lindo flaquito, envuelto en una sábana, con un turbante de toalla, un collar colgado del cuello, y una cara que no sabés si es un mascaron de proa o el payaso mas decadente de un circo rasca.
Si amigas, la adolescencia de una chica cross frente a su solitario espejo va del éxtasis a la decadencia en un segundo.
Cuan agradecidas estaremos siempre a la magia de Internet. Gracias a éste magnífico medio pudimos averiguar mas sobre nuestra pasión cross, descubrir que hay legiones de nosotras en todo el mundo, que todas pasamos por casi las mismas experiencias, sin distinción de edades, razas, credos o latitudes geográficas. Nos pudimos comunicar entre nosotras, que no es poco. Pero volvamos a mi pregunta inicial.
Damos por sentado que una quiere verse como la mujer mas sexy del mundo, fresca, natural, delicada, atractiva... Diosa!
Con el tiempo vamos invirtiendo en lencería, calzado, vestidos, maquillaje, pelucas, bijou, perfumes. Vamos perfeccionando nuestra apariencia, el espejo nos devuelve a una mujer cada vez mas perfecta...Pero nuestro ojo cross nos sigue engañando!!!
Una logró comprarse unas lindas medias de red, te ponés un corcet de vinilo que es un sueño, te acomodas una mini de cuero que corona unas piernas perfectas, que nacen de ese calzado con tacos de 15 cm. Te mirás al espejo y: ¡Wow!¡Qué hembra que sos, mamita!
Das miles de vueltas frente al espejo, vas, venís, pasas, te asomas, tiras besitos!
Al rato te preguntás: ¿Y ahora qué hacemos?
Respuestas: -Me voy a dar una vuelta en auto
-Me voy a una disco.
-Me voy a caminar por la zona roja y dejo que me toquen bocina.
-Me voy a un shopping.
-Me voy a un parque a pasear el perro.
-Olvidate de todo, no podés salir así. Es mas seguro que te metan en cana, que recibir la corona de Reina de la Primavera!!!
Tengo que verme mas “normal”, si quiero salir y compartir mi imagen de mujer.
Te mirás al espejo y empezás a preguntarte: ¿De haber nacido mujer y con la edad que ahora tengo, me pondría ésta indumentaria mas allá de trabajar en un show o tener una super noche de fantasías erótica y cama hot???? Por supuesto que no.
Bendita sea la ropa unisex!!!! Jeans, musculosas, remeritas, sandalias, aritos, pulseras y collares...Un momento!
Me veo al espejo con todo eso que usan indistintamente los hombres y mujeres, pero...solo veo al hombre, no a la mujer!!!
No hay caderas, no hay tetas!!!
OK...me pongo un poco de relleno aquí, otro poco allá...!
Veo una mujer ahora??? ...Veo al muñeco de Michelín! ...Horror!
Resultado: La ropa unisex es un gran invento, pero al rato de usarlas no me siento mas mujer que el sodero que descarga los cajones del camión de reparto.
Definitivamente no hay nada para una cross que usar ropa bien de MUJER, nada de unisex!!!
Faldas largas, cortas, medianas, camisolas de seda, camisitas de tul, tops, remeritas escotadas, pantalones ajustados (solo si tengo buenas gambas y culo), vestidos cortos, largos, lleno de colores y detalles de voladitos, bordados, aplicaciones de mostacillas, piedritas y demás.
Ahora si. No me importa no tener “las super caderas”, no me importa no tener “tetas de 120”.
Me gusta que los colores me sienten bien y se luzcan junto a mi piel, que las faldas acaricien mis piernas, las cubran o descubran al caminar. Me gusta ver mis manos con anillos, mis muñecas con pulseras y mi cuello rodeado de un collarcito. Me gusta jugar con mis aritos que adornan mis orejitas.
Veo en el espejo una mujer que puede salir a pasear, al shopping, a la plaza, a la disco.
Igual, no abandonaré mi corcet de vinilo, ni mis tacos de 15 cm, ni mi uniforme de colegiala, ni mi traje de conejita, ni mi maya de cuero con tachas, ni mi traje de diablita, ni de Gatubella, solo lo usaré en fiestitas y en la intimidad dando rienda suelta a mis fantasías mas calientes, en especial si comparto la cama. Una se debe a su público!!!
Besos!
Vicky
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